El equipamiento del baño en una guardería está regulado, entre otras cosas, por un decreto del Ministro de Educación. Este decreto establece el número recomendado de lavabos y retretes, así como el mantenimiento de la limpieza en la habitación. En menor medida, aborda cuestiones de seguridad y ergonomía, que son igualmente importantes en un baño infantil. ¿Qué se debe saber al diseñar un baño en una guardería?
De acuerdo con el decreto del Ministro de Educación sobre seguridad e higiene en escuelas y centros educativos públicos y privados, se recomienda un número específico de lavabos, retretes y urinarios. En una guardería debe haber 1 lavabo y 1 inodoro para no más de 15 niños. El baño de la guardería también debe tener una ducha o un dispositivo similar para lavar a los niños.
El administrador de la institución está obligado a garantizar el acceso constante a agua caliente a una temperatura de aproximadamente 35-40 grados. Es importante saber que, por razones de seguridad, los grifos para niños de 3 a 5 años deben tener un termostato y un sistema de mezcla de agua caliente y fría para evitar quemaduras por agua demasiado caliente.
No hay directrices estrictas sobre la altura de instalación del equipamiento. Sin embargo, se enfatiza que la institución debe instalar los lavabos y retretes a una altura adecuada para los niños o proporcionarles un taburete antideslizante.
La ley también estipula que las instituciones educativas están obligadas a mantener la limpieza en los baños. Para garantizar una mayor higiene, se recomienda el uso de materiales lavables, resistentes a la humedad y a la abrasión en las paredes, hasta una altura mínima de 2 metros. Una de las últimas modificaciones es la obligación de equipar los baños con productos de higiene: según la justificación, estos son jabón, papel higiénico y toallas de papel o un secador de manos.
En la edad preescolar, los niños adquieren hábitos higiénicos adecuados. Aprenden tanto a lavarse las manos y los dientes como a usar el inodoro. Un baño correctamente y ergonómicamente diseñado contribuye a:
Se debe prestar especial atención al equipamiento del baño, adaptado a la altura y capacidades del niño. Al considerar la altura media de los niños en un grupo de edad específico, se pueden determinar las alturas óptimas de instalación del equipamiento.
Aunque las regulaciones no especifican la altura exacta de instalación del equipamiento, se asumen alturas promedio dependiendo de la edad y altura del niño:
En el caso de las tazas del WC, también es importante la longitud, permitiendo que el niño se siente cómodamente en el asiento. Las dimensiones recomendadas son:
En el caso de tazas demasiado anchas, se pueden usar asientos adicionales para inodoros. Estos permiten ajustar convenientemente la anchura y longitud de la taza en caso de un baño destinado a diferentes grupos de edad simultáneamente.
Los niños pequeños aún no pueden usar el inodoro sin sentarse. Para garantizar condiciones higiénicas a los niños, se recomienda instalar un dispensador de fundas desechables para inodoros. Gracias a la funda de papel, el niño no toca el inodoro con las manos. La mayoría de los riesgos asociados con el uso del inodoro son bacterias, virus y parásitos transmitidos por las manos. Las fundas generalmente cubren también los bordes del inodoro, minimizando así el contacto con la taza del WC. El uso de fundas de inodoro no reemplaza el lavado de manos, por lo que los niños deben aprender a lavarse las manos correctamente después de usar el inodoro.
Por razones de higiene, las guarderías también están renunciando al uso de toallas tradicionales en favor de toallas de papel. Esta decisión conlleva la necesidad de equipar adicionalmente el baño infantil con dispensadores de toallas de papel. Al igual que con los demás accesorios del baño, el dispensador debe instalarse a una altura cómoda para el niño.
El aprendizaje de hábitos higiénicos adecuados y del uso del inodoro está sujeto a las mismas reglas que otras actividades educativas para niños de esta edad. Por lo tanto, es importante crear un ambiente amigable en el baño de la guardería. Vale la pena elegir un equipamiento diseñado pensando en los niños. Algunos fabricantes de cerámica y accesorios ofrecen líneas de productos con dimensiones y colores adecuados para los niños. Además del equipamiento estándar del baño, se necesitan también ganchos para toallas (si la institución usa toallas tradicionales) y estantes para vasos y cepillos de dientes en la guardería. Es inaceptable almacenar productos de limpieza en el baño infantil.
Otro aspecto de la decoración de los espacios para niños, incluido el baño, es la elección de materiales amigables. Las pinturas o elementos de plástico no deben tener efectos tóxicos. Al elegir materiales de acabado, se pueden tener en cuenta las certificaciones otorgadas, como la EU Ecolabel o la alemana TUV.
En resumen, las instituciones educativas, incluidas las guarderías, deben cumplir en primer lugar con los requisitos establecidos por el Ministerio. Un baño atractivo es un estímulo para un aprendizaje más rápido de las reglas de higiene y del uso del inodoro. El baño en la guardería también debe proporcionar a los niños una sensación de seguridad e intimidad. Por eso es importante un diseño sin compromisos del baño para los niños.
Fuentes:
Kindergarten Architecture, Marc Dudek, Spon Press, 2000
Decreto del Ministro de Educación Nacional de 31 de agosto de 2010 sobre los tipos de otras formas de educación preescolar, las condiciones para su creación y organización, y su funcionamiento (Boletín de Leyes de 2010, No. 161, Pos. 1080, con modificaciones posteriores)
http://ec.europa.eu/environment/ecolabel/products-groups-and-criteria.html
http://sfm.dps.louisiana.gov/doc/pr/prada_chapter-15.pdf